DOCUMENTAL: “I AM A DANCER”.

“Vivo mientras danzo”.

Hoy me apetece compartir con vosotros, una de las Artes que más amo. Una de esas Artes más bellas, sublimes y sobrenaturales.

¡El BALLET! ¡LA DANZA!

En Netflix, una de las plataformas de streaming en que me paseo a veces, encontré –hace unos meses- esta JOYA de película documental, sobre ÉL, sí: ¡¡RUDOLF NUREYEV!! Y no pude resistirme a contemplarla, porque las divinidades no suelen ser muy frecuentes en este tonto, cruel y hueco mundo… cada vez más feo, por ¡tantas cosas!… Pero…:

¡¡gracias a DIOS existen los GENIOS y los ARTISTAS!!

y por eso, la BELLEZA y eso ESPIRITUAL y ELEVADO que ella conlleva,

¡¡nos salvan, nos regeneran, nos dan oxígeno y AMOR!!

¡¡GRACIAS, LOCAMENTE INSOPORTABLE y DIVINAMENTE TALENTOSO:

RUDOLF NUREYEV!!…

Esta película está dirigida por PIERRE JOURDAN. Es un film (de 1972), de total Producción y factura francesa, y un verdadero, completo y sentido homenaje a este portento de artista. Un recorrido de su vida, desde sus orígenes tártaros –que no rusos-, hasta su deserción-huida del Comunismo, refugio y asilo en Occidente, y todo su despliegue, crecimiento y esplendor como bailarín y Maestro de la Danza, hasta su muerte. En realidad, NUREYEV es ya Patrimonio Universal, por el impresionante legado que nos ha dejado con su talento.

El film es muy interesante, porque no idealiza a Nureyev, nos lo presenta de carne y hueso, y con todas las complejidades de su personalidad e historia. Y vamos recorriendo su persona, su vida y carrera, con él mismo, ya que él es EL protagonista de este Documental. No hay ficción ni idealización.

Al contemplar esta película, volví a constatar lo de siempre: todo don viene acompañado, siempre, de cruz. Los genios, los talentosos, los muy distintos, los superdotados, siempre: SUFREN. Porque SON MÁS y MEJOR, ESTÁN “MÁS ALLÁ” y “MÁS ARRIBA”. El resto de los mortales, aún somos muy mediocres, volamos bajo y, muchos, son como el pavo real: cacarea, abre su plumaje, pero…

Estos GENIOS desencajan, y –muchas veces- son catalogados de “inadaptados”. ¿Será porque no se “adaptan” a ESTE tipo de mundo, de sociedad, de tipología de Cultura, cosmovisión, mentalidad; a este modelo de Hombre?… ¿Quién será, realmente, el inadaptado, el desubicado, el mediocre?…

Además: el GENIO siempre ¡molesta! ¡llama la atención!

Con esto que digo, no justifico el mal carácter, lo díscolo, los prontos y arrebatos, y desplantes de Nureyev. Pero, todos tenemos nuestro genio, y nuestras “salidas de tono”, y nuestros días buenos y malos. ¡Más aún una persona sometida a la presión pública y mediática internacional como lo fue él, tantas veces asfixiante! Como ya está muerto –y creo ciegamente que a los muertos hay que dejarlos en paz, para siempre-, como dice el refrán: “¡allá él”! Además, queridos lectores: ¿quién soy yo para juzgar a una persona TAN genial, y sufrida, que me dio TANTO durante toda su vida, y me hizo TAN feliz siempre?…

Creo, sinceramente, que debe ser MUY duro SER la “piel” de un GENIO… Se debe disfrutar de una felicidad y plenitud mayúsculas, supremas e insuperables. Pero también, por lo que conocemos de ellos: sufren, y mucho, y a veces demasiado, hasta lo indecible… Nos sobran ejemplos. Es el precio del talento y la genialidad. El altísimo costo de ser muy distinto.

¡¡Gracias a esta paradoja!! ¡¡Gracias que ellos existen!!

Quienes amamos el Arte y, puntualmente, la Danza, ahondamos en esta película documental –de manos de su Director y de Nureyev-, en lo que es el ARTE de la DANZA en sí misma; en ese Arte del cuerpo y el lenguaje corporal; en el misterio y riqueza de la expresión. El cuerpo, trabajado, vivido, sentido y expresado, técnica y bellamente, se convierte en Arte. Para ello, la precisión, la perfección, el equilibrio, el dominio, la disciplina, el sacrificio, la renuncia, son las bazas cotidianas constantes para compaginar y compactar trabajo y talento, con belleza.

Eso fue la esencia y el alma de Nureyev. Y ésa ha sido la lección y herencia que nos ha dejado como bailarín y Maestro, pero también como ser humano: nada logramos sin poner todo de nosotros mismos. En una gran parte de lo que somos y logramos, está lo que nosotros fuimos construyendo, con nuestra propia lucha interior, por superarnos y ser mejores. No hay nada más meritorio, bello, sólido, profundo y maravilloso que tomarse a uno mismo en serio, con responsabilidad, voluntad férrea, convicción e ilusión amorosa. El yo personal, mi proyecto personal, no es para que me lo regale otro. No se trata de existir “de prestado”. Yo debo ser el primero en ilusionarme conmigo mismo, y comprometerme –con todo lo que soy y tengo- a lograr ser una plena persona, íntegra y totalmente realizada como tal: PERSONA, acorde a todos los talentos que me han sido regalados. Pero sin nunca olvidar lo esencial: esfuerzo, sacrificio, constancia, disciplina, seriedad, trabajo… y mucha ilusión…

¡aunque nos cueste sufrir, y mucho!

Y

¡aunque también nos demos muchos revolcones de fracasos!

eso también nos hace grandes, y quizás: ¡muy GRANDES!

El Documental nos presenta este Mito de la Danza. Nos permite recordar ¡cuántas veces lo disfrutamos! ¡qué felices nos hizo! Y recorremos también esos maravillosos años junto con su partenaire u otro yo bailando: ¡¡MARGOT FONTEYN!! A lo largo de la Historia ha habido pocas como ella: una Dama en escena y en su vida. Una bella persona fuera de la escena, y una de las más eximias, perfectas y exquisitas bailarinas clásicas que han existido. ¡Cuántos años danzando con Nureyev! ¡Algunos los vimos, los disfrutamos! No ha habido, en la Historia del Ballet, otra pareja como ésta. Parecían nacidos el uno para el otro, cuando estaban en las tablas, y en sus vidas privadas tenían una relación de amistad muy entrañable y cercana. ¡A pesar de la tremenda diferencia de edad, procedencias, culturas y formas de ser! Ambos se ¡amaban! Otro clarísimo ejemplo de que –entre varón y mujer- la amistad verdadera es posible.

¡Nunca los olvidaremos! ¡Cuánto y cómo se los echa de menos!

Sigo pensando, y seguiré diciendo siempre, que hay tres clases de personas que no deberían morir nunca jamás:

¡las MADRES, los GENIOS y los ARTISTAS!…

Como siempre, os recomiendo otra JOYA de película. Creo que no os arrepentiréis.

Hasta la próxima, amigos.

(vosotros poned la música…)

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