… La misteriosa y desconocida RUMANÍA…
Ya sé, ya sé, ya sé… estáis pensando en el ¡¡CONDE DRÁCULA!!… más aún con esa fotito que os he puesto al comienzo de esta Publicación…
Tentada estuve de hablaros de él. Pero no lo haré, al menos ahora. Dejemos que siga durmiendo tranquilito… así no nos muerde, no nos asusta, no nos envuelve misteriosamente en su capa… y… ¡¡¡no nos roba sangre y enamoramiento!!!…
Como decimos en España: “déjalo estar… así está bien”.
En esta ocasión voy a referirme a este EXCELENTE DOCUMENTAL de RUMANÍA, de y en HBO. Es del año 2020. Una verdadera joya de ésas que, de vez en cuando, nos regala el Cine. Está dirigida, escrita, producida y editada en el montaje, magistralmente, en todos los aspectos de su factura como film, por el brillante: ¡¡¡ALEXANDER NANAU!!!
No voy a detenerme a enumeraros las Nominaciones y Premios que ha recibido esta GRAN película, porque estaríamos hasta mañana hablando de ello, y tampoco me alcanzarían los dedos de mis manos. Solamente os diré algunas cositas al respecto: entre sus muchos merecimientos está que ha sido la primera película rumana a ser Nominada a los Óscar (en 2021), pero no sólo como mejor Película Documental sino también en la Categoría de Mejor Película Extranjera. Además, tiene el mérito también de ser la segunda película, en la historia de los Óscar, en ser Nominada en dos Categorías. No son detalles menores.
Debo confesar que me gusta mucho el Cine rumano, el de calidad, que tiene mucha. He podido y puedo contemplar siempre muchas películas de esa procedencia, sobre todo gracias al Festival anual CINEUROPA, que se celebra anualmente en la ciudad de SANTIAGO DE COMPOSTELA (Capital de Galicia, al N.O. de España). Realmente la Cinematografía rumana ha ido madurando mucho, en los últimos años, en temas, personajes, interpretaciones, historias, factura técnico-narrativa y estética, en actores y actrices, en directores, en guionistas, en inversión, en proyección al mundo… Es un Cine que va creciendo mucho en calidad y propuestas. Interesante es seguirlo.
Esta película Documental es acerca de un hecho real, de una historia que ocurrió en Rumanía: una tragedia sanitaria tras el tremendo y fatídico incendio en una actuación musical, en Bucarest (su Capital). El Club que se incendió se llamaba “COLECTIV” (en rumano). Las llamas estallaron en octubre de 2015 y lo devoraron. Murieron inmediatamente 27 personas y 180 quedaron heridas, algunas de mucha gravedad. Durante los meses siguientes, 37 más mueren, sobre todo por la falta de atención médica adecuada en los hospitales públicos.
Este Documental, en años de una pandemia como la del CORONAVIRUS, con todas las verdades que fue desnudando de los Sistemas Sanitarios de los países y sus Administraciones y Gobernantes, fue de suma importancia para generar conciencia, reflexión y movilización ciudadana, en todo el mundo. La película en cuestión, si bien no se refiere a un problema propiamente de salud y enfermedad, tiene una estrechísima relación con todo lo que vivimos y seguimos viviendo a raíz de la tragedia del COVID 19. Por eso, aunque es una historia “vieja como la de Adán y Eva” en todas partes del planeta, cobra ahora mucho peso y abona nuestro análisis, posicionamiento, reclamo y compromiso. Una vez más comprobamos, en y con este Documental, lo esencial y urgente que es una Sanidad Pública digna, segura, competente, honesta, humana, capacitada, planificada, organizada, responsable, operativa y rápida, a la hora de la cuestión de la VIDA y la MUERTE de PERSONAS. El Documental nos relata –hasta con lujo de detalles- personas, diálogos y acontecimientos de una tragedia que pasó… y pasa… y vuelve a pasar… El CORONAVIRUS nos lo está demostrando.
En la película nos encontramos con la verdad “de la milanesa”, como dice el refrán, en su totalidad. Y eso fue gracias a la búsqueda apasionada, fiel, desnuda, profesional, implicada, sostenida, constante, presionante, honesta, asfixiante, valiente, desinteresada, desideologizada, sin espectáculo ni manipulación ni persiguiendo audiencia, dinero, fama, éxito, popularidad, rating, competencia… una búsqueda denodada y comprometida totalmente, de un grupo de Periodistas tras la verdadera verdad. Realmente apreciamos y admiramos y aplaudimos un Periodismo así: verdadero Periodismo. Un PERIODISMO QUE SÓLO BUSCA y MUESTRA LA VERDAD. Este PERIODISMO ES, ASÍ, TAL CUAL, EL QUE LA HUMANIDAD NECESITA y RECLAMA.
El Guión está construido sobre historias duales de periodistas de investigación del periódico rumano, deportivo, llamado “Gazeta Sporturilor”, que siguieron –casi obsesiva y obcecadamente- el caso, hasta descubrir la corrupción (más bien: corruptela) y la pésima administración y burocracia de la atención médica pública, y descubrieron y destaparon totalmente la respuesta que dio el Gobierno a esta trágica crisis, en el Ministerio de Sanidad. Todo olía a podrido en esta historia y tragedia.
En los primeros pasos de esa investigación, se dieron con la fatídica y demencial noticia de que: los desinfectantes usados en los hospitales del país, estaban diluidos. Así y con esa punta de hebra –bastante macabra, por cierto- empezaron y empezaron y empezaron a tirar del hilo… No os voy a contar más detalles. No voy a hacer spoiler. Simplemente os diré que, a medida que desenredaban y tironeaban de esta endiablada y retorcida madeja, iba saliendo mucha podredumbre de negociados entre el Estado y su Gobierno e Instituciones, con Empresarios y amiguetes y demás “hierbas” bien cuidaditas y “untadas” del Sistema. Nos queda bien al descubierto también en este Documental: la putrefacción de la mentira, la manipulación, el silencio cómplice, la tergiversación, el “tonto e idiota útil”, la hipocresía, la dejadez, la abulia, la indiferencia, la insensibilidad, la charlatanería, la burocracia, la lerditud, el “oficinismo” y los “carguitos” y “chiringuitos” habidos y por haber, y el infaltable lavado de manos, con el consiguiente “pasarle el muerto” al otro… El film no escatima en su realismo al presentar crudamente esas actitudes, conductas y hábitos humanos tan presentes en la Sociedad. Es como si nos retratara. Como si nos hiciera de espejo.
Me parece importante agregar que este Documental está, además, “abriendo en canal” y sin anestesia, la ya constatada llaga que ha dejado el Sistema y Régimen del Comunismo en los países del este de Europa, en los que estuvieron en la “Cortina de Hierro”. Rumanía, en este caso, presenta todo un Sistema y realidad total, heredados de la mentalidad, hábitos y funcionamiento de la dictadura y Régimen Comunista. No sé si hace falta recordar acá al DICTADOR y DUEÑO de TODA RUMANÍA y de TODOS LOS RUMANOS: NICOLAE CEAUSESCU… de negra y fatídica memoria, y final… y de su esposa-brazo de hierro del Sistema y Dictadura: ELENA CEAUSESCU, y familia. También ella de negra y fatídica memoria y final. ¡¡¡Vaya dos!!!… ¡¡¡Qué endiablada y terrible herencia dejaron a Rumanía, Europa y el mundo!!!… Recordad y sacad conclusiones.
Y, por supuesto, este Documental nos hace la epifanía total del sufrimiento y tragedia silenciosa y martirial de los inocentes que sufrieron aquel incendio y todo lo posterior que ello les acarreó. Vemos cómo estos periodistas y la gente que los apoyó, se hicieron cargo de estas personas al asumir su tragedia, en un compromiso cuidadoso, conmovedor, afectuoso, respetuoso, misericordioso, desinteresado y noble con ellos, buscando sólo la verdad para realmente ayudarlos y que se salvaran y salvaran aún lo salvable. Vemos un acompañar y cuidar, desde la verdad y la justicia, a estas personas.
Realmente llegamos a dolernos, indignarnos y no callarnos frente a algo así, como también de cara a cualquier otra fatalidad y catástrofe. ¡¡Nos hierve la sangre y se nos desgarran las entrañas ante cosas así!! Es la ¡¡¡MATANZA DE INOCENTES!!! y así hay que llamarla, así hay que escribir de y sobre ella, así hay que vociferar y…
¡¡¡¡¡NUNCA PERDER LA MEMORIA!!!!!
El Documental tiene una mostración y un tono tan realista y auténtico que nos estremece y nos moviliza, realmente. Y no lo hace desde un discurso o mirada o matiz político ni ideológico, sino solamente desde la VERDAD, desde la MORAL-ÉTICA, desde los VALORES, desde la SOLIDARIDAD y AMOR AL PRÓJIMO. No hay ideologismo en esta película. Solamente respiramos honestidad, coraje, coherencia, humanidad, compromiso y profesionalidad en todos y cada uno de sus fotogramas de metraje. Estamos ante un GRAN Documental, ante una GRAN película.
Os la recomiendo sobradamente. No os arrepentiréis de verla. Ya veréis cómo y cuánto os cuestionará y movilizará “por dentro”, y os planteará una certeza absoluta: no hay nada ni nadie malo que no pueda ser descubierto ni vencido, cuando nos comprometemos realmente con la verdad, cuando la perseguimos libre, obstinada y “patológicamente”, cuando nos unimos entre nosotros para ir tras ella, y lo hacemos juntos y con todas las exigencias y consecuencias que esta búsqueda y hallazgo de la verdad nos implican. Esta película es una constatación de que todo eso es posible; y es un empujón y un aluvión de coraje, confianza y esperanza para nosotros que también nos debatimos y sufrimos inmersos en tanta mentira, manipulación, ideologización, corrupción, complicidades, caradurez y desfachatez, cobardía, miedo, silencios, frustración, engaños… día a día. El film es, en definitiva, un canto de esperanza, un aliento, y un mensaje de amor solidario y hasta las últimas consecuencias.
Hasta la próxima, amigos.