JODIE FOSTER.

¡¡¡¡PALABRAS MAYORES CON ESTE “MONSTRUO” DEL TALENTO!!!!

Antes de escribir esta Publicación, os confieso que me he puesto de pie –una vez más- ante esta pequeña gran GENIO y he tenido muchos deseos de aplaudir y vitorear a rabiar. Si os viene bien este sentimiento y experiencia, os lo comparto. Quizás sintáis y hagáis lo mismo. ¡¡¡¡¡Hablamos de JODIE FOSTER!!!!!…

Sabéis bien que pienso que la Historia de la Humanidad, de la Cultura y del Arte, la vamos haciendo los seres humanos. Siglos y siglos se yerguen como testigos de esta certeza. Para los que somos creyentes, personas de Fe, también creemos que hay una Providencia muy misteriosa de Dios, que también va “escribiendo” con los Hombres esa Historia. Y lo va haciendo no a pesar de los Hombres, sino con los Hombres. Va “redactándola” y “relatándola” como Aquél que escribe derecho en renglones torcidos. Por eso esa Historia humano-divina es, en el fondo más profundo, un verdadero misterio rico, complejo y maravilloso. De ahí que esta Historia nunca fue ni es ni será perfecta ni acabada. Está en constante proceso y camino de evolución, cambios, complejidades, contradicciones, luces y sombras, aciertos y errores, grandezas y miserias. Si esto es así en lo referido a la Humanidad, el Arte y la Cultura, lo es también mucho para el Cine. Ciertamente, la Historia del Cine no sería la misma sin los GRANDES GENIOS CREADORES y HACEDORES de este Séptimo Arte. Hombres y mujeres, desde hace más de 100 años, han ido y siguen haciéndolo, transformando, aportando y fecundando al Lenguaje Audiovisual. Cada tanto, parece que Dios o las musas o poderosos seres sobrenaturales, hacen brotar de la nada personas más emblemáticas, más especiales, con carismas que las elevan a la genialidad, y que transforman la Historia, la realidad y la vida de los seres humanos. La Historia del Cine no sería la misma sin estas personas y, en este caso se aplica rotunda, contundente y sólidamente, porque el CINE NO SERÍA EL CINE SIN JODIE FOSTER.

Como todos los GENIOS superdotados, muy distintos, muy por encima del resto de los mortales, más allá de todo y de todos, han sufrido y sufren y sufrirán, porque tienen una inteligencia y sensibilidad mucho más elevada, refinada, trascendente de todo y de todos. No están en lo superfluo ni en lo epidérmico ni en lo inmediato ni en lo anecdótico ni en la dispersión. Se concentran en lo esencial y –desde allí- van percibiéndolo todo y a todos. Tienen matices, conductas, sentimientos, razonamientos, sensaciones, intereses, procesos, talentos, ritmos… muy propios y muy diferentes a la mayoría de los seres humanos. Su captación y vivencia de la realidad –desde su inteligencia- es enriquecida por una fina y exquisita sensibilidad, emotividad y afectividad. Integran todo en un universo interior muy íntimo y rico. Son personas especiales. Muchos de ellos fueron y son tan geniales –y por ello muy distintos y llamativos socialmente- que no encajaron ni encajan en esta realidad que los seres humanos hemos fabricado para vivir o ¿sobrevivir? Y así fueron y son “inadaptados”, rebeldes, cuestionadores, rompedores, revolucionarios, insumisos, incomprendidos, marginados, cuestionados, perseguidos… y mucho de eso por culpa de una Sociedad no apta para el distinto, no apta para el que destaca en algo y por algo; una Sociedad de moldes y patrones, de prototipos, de modelitos, de discurso único… En el fondo, nunca dejé de pensar que el TALENTO y el TALENTOSO molestan, sobre todo en una Sociedad cada vez más mediocre, chata, ignorante, superficial, inmediatista, exitosa y uniforme. Los TALENTOSOS son MUY DISTINTOS y la Sociedad raramente está preparada ni flexible ni respetuosa ni acogedora ni impulsora ni propensa ni promotora –realmente- respecto de estas personas. Incluso tenemos el atrevimiento, ignorancia y crueldad de calificarlos de “raritos” y de “conflictivos” y de que sólo buscan llamar la atención y ser centro, generalmente.

Pues bien, nuestra PEQUEÑA GRAN GENIO: JODIE FOSTER, nunca dejó de experimentar también todo esto. Dueña de un TALENTO como el de pocas, y no sólo como ACTRIZ CON MAYÚSCULAS, y persona que ha logrado el éxito, el prestigio, el respeto, la valoración y el amor del Cine en EE.UU., Hollywood y el resto del mundo. Es que esta “pequeñita, menuda personita” ha trascendido su país y se ha constituido ya como uno de los MITOS del Cine, por su TALENTO, TRABAJO, PROFESIONALIDAD, PERSONALIDAD y SÍMBOLO. Ella es ya Patrimonio de todos nosotros. Le guste o no le guste a quien sea, le pese o no le pese a algunos. La realidad y la verdad de ELLA están “ahí”, para qué vamos a dar vueltas y a negarlo. La realidad es la realidad. Y la verdad es la verdad. Y lo cierto es que, pocas personas –menos aún mujeres- han logrado en el Cine todo lo que ha alcanzado Jodie Foster, empezando por una dilatada carrera y experiencia, que hunde sus raíces en su más precoz y tierna infancia. Desde pequeñita la hemos contemplado en los encuadres de la TV y luego del Cine, y estos últimos años, mucho se ha prodigado y sigue haciéndolo como Directora y Productora. Es que creo sinceramente que ¡¡¡nadie puede darle “lecciones” de CINE a esta mujer!!!

Confesemos: ¡¡¡la hemos visto y sentido CRECER en las pantallas, como actriz, mujer y persona humana!!! El año próximo (2022) va a cumplir recién 60 años, de los cuales unos ¡¡¡¡55 años!!!! viene estando en el universo del Lenguaje Audiovisual. Y no hago más apreciaciones al respecto, porque creo que estoy escribiendo para gente inteligente y reflexiva. “A buen entendedor, pocas palabras”.

Os preguntaréis porqué he elegido esta vez hablar de ella. Pues bien: he visto todas las películas de Jodie Foster, como Actriz, como Directora y como Productora. TODAS. Y también las he comprado y forman parte de mi filmoteca privada. La vengo siguiendo desde siempre, no sólo por su talento y trabajo, sino porque me parece una de las personalidades más completas, ricas, sólidas, variadas, independientes, libres, experimentadas, profesionales e interesantes en el mundo del Cine, y también la sigo por lo mucho que ha aportado, enriquecido –y sigue haciéndolo- al pensamiento, cultura y “lectura” de la realidad política, social, cultural, vital y humana. Además, nunca se ha subido al pináculo de su yo ni de la vanidad y orgullo, y menos aún se ha enrolado en esa exposición peligrosa y escandalosa de la intimidad y privacidad personal y familiar, en la que caen muchas Stars del Sistema. No es amante del “circo”. Siempre ha gustado de la vida privada discreta, sin sensacionalismo, con sencillez y cotidianidad. Ha sido una especie de sutil y hábil “fiera” para autoprotegerse y proteger a los suyos, siempre. Por otra parte, es una persona polifacética, muy formada, muy culta, y muy rica en matices, conocimientos y experiencias. De niña pequeña prodigio a este MUJERÓN que contemplamos en nuestros días. Ojito ojazo con Jodie Foster: menudita, pequeñita, pero no es cualquier cosa ni para tomársela a la ligera. Tiene ¡¡¡mucho “peso específico”!!! por lo que es… y por eso, a algunos/as, les hace “pullitas” y “pelusitas”… Y lo dejo ahí, botando… Sé que entendéis sobradamente esto que digo. Y ella no ha tenido que hacer muchos esfuerzos ni escándalos ni ruidos ni presiones ni nada de nada para seguir –resiliente, paciente y prestigiosamente- al pie del cañón (como se dice) resistiendo, integrando y superando en sí misma al Sistema, que bastante mal la ha tratado mucho tiempo, sobre todo en su país, porque en el resto del mundo ella es una INSTITUCIÓN, al nivel de otros genios y leyendas del Cine. Ya sabéis: ningún profeta es muy querido en su tierra… menos aun cuando es un talentoso y un trabajador incansable. Y esto último que digo, triste y trágicamente, ha sido y es y creo que será una confirmación real en la sufrida experiencia de la persona talentosa. Más aún cuando hablamos de un universo tan competitivo y exitista como tiende a ser mucha parte del Cine. A muchos, la CALIDAD les molesta, les hace cosquillas y les pone los pelos de punta y las lanzas en guardia. Jodie Foster no ha necesitado empuñar armas (lo digo en sentido figurado) en ningún momento, pero ha sufrido, y más de lo necesario e inimaginable, pero se ha ido imponiendo, abriendo caminos y sosteniéndose en el difícil y dolorosamente jubiloso equilibrio de la CALIDAD, el TALENTO y el TRABAJO. No ha necesitado ni necesita más. Esto es su pasaporte.

Pero la otra razón por la que decidí hablaros de ella en esta Publicación, es que el mes pasado contemplé y disfruté un DOCUMENTAL EXCELENTE llamado:

“JODIE FOSTER, HOLLYWOOD EN LA SANGRE”.

Sinceramente creo que esto fue lo que me decidió y empujó a escribir sobre ella.

Este film DOCUMENTAL (de 2021) es fruto de dos franceses: la interesante, experimentada y muy buena Directora CAMILLE JUZA, y del periodista, escritor y crítico de Cine YAL SADAT. Ambos nos regalan una muy buena película; una JOYA de Documental. Con maestría técnica y narrativa nos hablan del “universo” JODIE FOSTER, en todos sus aspectos y aristas. En cada uno de los fotogramas, nos encontramos con TODA Jodie Foster presente, vívida, personal, íntima, honesta, sincera, libre, natural, espontánea, inteligente, con sentido del humor, y sensitiva. De sus labios, de imágenes, de testimonios, de filmaciones… vamos recorriendo con ella sus entrañas íntimas, su historia personal, familiar y artística… vamos “tocando” la intimidad profunda y misteriosa de un genio que, además, es muy humana. La vemos, oímos y sentimos como persona, mujer, actriz, cineasta, hija, hermana, esposa, madre, amiga, profesional, culta, rica, bella, adulta y madura, plena, cercana, afectuosa, entrañable, trabajadora, reflexiva… Se nos erige no sólo como muy americana, sino que –por su escolarización, su formación familiar, su manejo de idiomas, sus estudios universitarios, sus propias opciones y su hacer Cine fuera de los EE.UU.- también confirmamos lo que ya sabíamos: es una cosmopolita y con una mente-corazón y alma- abiertos a lo universal. Es muy yankee, sí, pero con una clara y firme convicción y apertura a lo global, a lo que está más allá de sus fronteras físicas, geográficas, históricas, culturales y espacio-temporales. Por eso tiene un acendrado, agudo, inteligente, atinado y aquilatado y muy bien formado espíritu crítico, y nunca cae en fanatismos ni en lo superficial ni en imposturas. Jodie Foster ama su país, ama el Cine americano y todo lo americano, pero no es fanática ni “patriotera” ni chauvinista. No finge lo que dice ni lo que hace en esa capacidad de objetivación y análisis que la embellecen aún más en su condición de artista.

Todos conocemos el refrán aquél que alude a que todo gran hombre es el resultado de una gran mujer con él, “detrás” de él: cuidando sus espaldas, su vida, su integridad y dignidad, siendo un soporte y columna esencial en qué apoyarse y confiarse. Pues bien, Jodie Foster tuvo esto no en su padre (que las abandonó a su madre, a ella y familia), sino en una mujer: su MADRE. Ha sido un bastión y un bastón, un cayado, una lámpara, una guía, un espejo en que mirarse, un pulmón de aliento, una sangre de vida constante, un alimento que la ha acompañado y nutrido toda su vida, un libro de sapiencia y experiencia, una cuidadora, luchadora y defensora…Este Documental profundiza mucho en esto. Ya sabíamos muchas cosas de Jodie Foster, leídas. Otras nos sorprenden en esta película. Pero nunca habíamos oído y “tocado” e intimado con la verdadera, profunda e íntima Jodie Foster hasta ahora: son sus propios labios los que nos hablan de Jodie Foster. Y en ese viaje a sus entrañas más profundas, el Documental –y ella misma- es como que hacen un homenaje a esa MADRE. Podríamos atrevernos a decir que, sin su madre, Jodie Foster casi que no habría podido ser lo que es. El artífice de sí misma es ella, por supuesto, pero sin su madre cabría imaginar que las cosas habrían sido diferentes y hasta quizás erradas, perdidas y fracasadas. Nos encontramos con una Jodie que ama entrañablemente a su madre y que tiene una eterna deuda de gratitud con ella. Éste es un muy bonito matiz y aporte que logran estos Directores en esta película, y nos acercan más aún a una Jodie más personal y humana. Ya veis, queridos lectores: ¡¡¡¡las MADRES!!!! No sólo nos han engendrado y parido, sino que son parte esencial de aquello que somos y en lo que nos convertimos. Cada día me convenzo más que ¡¡¡las MADRES no tendrían que morir nunca!!!…

Voy acabando ya esta perorata. Os recomiendo mucho este Documental. No sólo porque os acercará la “otra” Jodie Foster –quizás no conocida por muchos realmente- sino porque repasaréis y reviviréis más de 50 años de Historia del Cine y TV gracias a este precoz ser talentoso. Pasaréis un rato muy agradable viendo esta película y, si os animáis, también os pondréis de pie y aplaudiréis a esta pequeña gran genialidad, que vimos crecer y transitar por todas sus etapas como ser humano y artista… hasta nuestros días… Hoy tenemos a la JODIE FOSTER madura y plena; la que ha trabajado con y para los grandes y mejores Cineastas del mundo del Cine… y que sigue latiendo en una pantalla o detrás de ella… ¡¡¡¡Larga vida a JODIE FOSTER!!!!…

Con su rostro de aquella juventud… a esta adultez ya tan fecunda… os dejo…

Hasta la próxima, amigos.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *