A estas alturas de mi vida, si la amada y excelente y camaleónica ¡¡KATE WINSLET!! hace una interpretación y lleva a cabo una apuesta y proyecto personales y prodigiosos: ¡¡no me extraña!! De extrañar sería que no lo hiciera. Y ahora se atrevió, en plena pandemia de Coronavirus, a zambullirse otra vez en la TV con una Serie de HBO: “MARE OF EASTTOWN” (de 7 episodios). Y ¡¡vaya joyita ha logrado!! Tal es esta JOYA que ya cuenta con ¡¡una cascada de Nominaciones para los Premios EMMY de este año!! Y ¡¡MUY BIEN merecidos estos reconocimientos!!
Todos los chicos crecen. Y ella hace ya ¡¡mucho tiempo!! que ES una “¡¡pedazo de ACTRIZ!” Versátil y talentosa como pocas. Una ACTRIZ completa. Ya en la plenitud de su madurez y carrera. La mocita de “Titanic” dejó de serlo. Es de las mejores actrices de su generación. Puro talento y también mucho trabajo y compromiso en el oficio. Además, con ¡¡mucha personalidad!! Y, esta vez, con una actuación deslumbrante, que nos tapa la boca, nos deja mudos y extasiados en la contemplación de ¡¡semejante actriz!! Una de sus mejores interpretaciones, ciertamente.
En esta Serie, además de ser la protagonista principal de la historia, es también Productora Ejecutiva. Y ya sabemos lo que eso implica en el lenguaje y mundo cinematográfico. La Serie es un drama policial, muy intenso, con espíritu de thriller. Y la huella de nuestra geniecita está en él. KATE WINSLET ¡¡ES ESENCIALMENTE LA SERIE!!, está TODA ella en la Serie: sin maquillaje ni peluquería ni vestuario ni retoques ni afectaciones, incluso pasadita de peso: con varios kilos de más. No necesita ningún toquecito ni arreglo. Es puro talento, sensibilidad y humanidad. Es una Winslet “al desnudo”, salvaje y natural, tosca, feroz, herida, compleja, contenida, intensa, conmovedora, desgarradora, descarnada, dueña de la pantalla y de todo el relato y puesta en escena. Tiene más que merecida su Nominación como Mejor Actriz Dramática en una Serie Dramática, en los Emmy de este año. ¡¡Tendría que ganarlo!! Ella es muy británica, pero ¡¡qué típica norteamericana de la “América Profunda” interpreta en esta Serie!! Ella es esa MARE de la América “interior”, íntima, silenciosa, sufriente, aguantadora, frustrada y ¡siempre esperando! La América rural, de las ciudades pequeñas, de los pueblos y de la familia.
Quiero detenerme un poco más en estos puntos, pues en la Serie están rica y profundamente desnudados. Si algo destaca el excelente y sólido GUIÓN, de BRAD INGELSBY (Creador y Director también de la Serie), es ese sentido y experiencia de pertenencia y enraizamiento en un lugar: el pueblo, la comunidad, y en la familia. Los vínculos maravillosos, inalterables, aunque complejos y dolorosos de la FAMILIA. Dicen algunos que “la familia es un mal necesario”. Creo que, en lo irónico y paradojal de la expresión, tienen razón. ¡¡Sufrimos por y con nuestra familia!! Nadie se libra de esto. Pero los dolores familiares nos dan fecundidad, solidificación, perdón, comprensión, tolerancia, compasión, misericordia, diálogo, encuentro y re encuentro, benevolencia, sanación… La familia nos hace sufrir y nosotros la hacemos sufrir. Pero el misterioso e indeleble vínculo de la sangre, de los genes y del convivir, nos va educando y crecemos como personas. En esta Serie hay mucho dolor familiar, relaciones complicadas, una historia familiar conflictiva y trágica, traumas, llagas sangrantes, pero también queda claro que siempre hay y habrá “algo más”. Ellos lo van, costosa, traumática y liberadoramente, descubriendo, y se van sanando unos a otros, sin quererlo pero también queriendo. Y de estos procesos personales y familiares, Kate Winslet sabe bastante. Ha sufrido varios matrimonios, parejas y divorcios. Y tiene sus hijos, a los que adora, de diferentes padres. Como es una actriz “de método”, todo ello lo ha capitalizado en la brillante interpretación de su personaje. Está sublime, extraordinaria, superlativa como MARE: una provinciana corriente, policía-detective, divorciada, madre, hija, amiga, ciudadana. Ya nos había maravillado diez años atrás con su primera incursión en la TV con una Miniserie, también de HBO: “MILDRED PIERCE”, la adaptación de una gran novela de James M. Cain, y es una muy buena remake de una película del Cine Clásico Negro y Dramático, interpretado por Joan Crawford (por la que ganó el OSCAR como Mejor Actriz): “Alma en suplicio” (de Michael Curtiz, de 1945). Pues bien, en esa Miniserie, Kate Winslet directamente nos deslumbró. ¡¡Qué actuación!! Y ahora ¡¡ésta!! ¡¡Lo ha vuelto a hacer!! La Serie “MARE OF EASTTOWN” que me ocupa ahora, de la que ella, además de protagonizar, es la Productora Ejecutiva, es un verdadero y contundente poema curativo. El desgarro “helegíaco” que recorre las venas y tejidos de sus secuencias, se va ahondando y canalizando progresivamente en un canto de SANACIÓN y REDENCIÓN personal, familiar y social.
Pero la Serie también es una radiografía perfecta de aquel refrán: “Pueblo chico, infierno grande”. Los que tenemos experiencia de esto podemos sobradamente confirmarlo y testificarlo. Somos de donde nacemos, pero también de donde pacemos. Los pueblos nos enriquecen en ese sentido y experiencia comunitaria de pertenencia y enraizamiento. Somos como una gran-pequeña otra familia: el PUEBLO. Lo amamos pero también despotricamos y pataleamos contra él muchas veces. Y ¡¡cuán difícil, enredado, retorcido y sufriente es el guardar la intimidad en ellos!! A veces es hasta imposible. Y esta Serie desnuda esto sin tapujos. Además, en este “cielo infernal” que es un pueblo, nos encontramos con ¡¡tantos secretos, mentiras, traiciones y misterios!!
El relato también se detiene minuciosamente en las víctimas y dolor de los inocentes, sobre todo los niños, adolescentes y jóvenes. En ellos recaen siempre las más desgarradoras y traumáticas consecuencias de nosotros, el mundo de los “adultos”.
Entre el excelente casting y actuaciones secundarias creo que hay que resaltar dos actrices que en la Serie destacan por encima de todos: JEAN SMART, una actriz “escondida”, con un gran talento “oculto”. Ella sustenta y alimenta también la actuación de Winslet, interpretando magistralmente el personaje de su madre en la Serie. Es una actriz de experiencia, y va acompasando -con sutilezas, palabras y detalles- toda la diégesis, el universo y el ritmo del relato. Y la siempre competente, versátil, sólida y secundaria ideal: JULIANNE NICHOLSON. Es de esas actrices que, por su talento, experiencia y vasta trayectoria fílmica, saben cuajar y acompañar a grandes. Ya lo demostró sobradamente en la película “AGOSTO” de John Wells (2013), junto a “pesos pesados” y “de calibre” lujoso de la interpretación, como Meryl Streep, Julia Roberts, Chris Cooper, Benedict Cumberbatch, Juliette Lewis, Ewan McGregor, Sam Shepard, Margo Martindale. ¡¡No ha trabajado con cualquiera ni en cualquier proyecto a lo largo de su carrera!! Y en esta Serie realmente “¡¡borda!!” a su personaje. Sorprende su descarnada y convincente actuación. Vive y hace vivir al personaje, en la pantalla y en el espectador. Es de esas actrices que sabes que siempre “cumplen” y “cumplirán”.
Este trío central femenino, capitaneado por KATE WINSLET, nos mete intensamente en cada episodio de la Serie, cada una con sus matices. Son personajes “columna vertebral” y médula de toda la Serie.
GUY PEARCE, como el nuevo e inesperado amor adulto de MARE, tiene una intervención pequeña en la Serie en cuanto a apariciones en pantalla, pero es una cuña que la acompaña en su proceso de apertura e inserción en la esperanza liberadora y sanadora de su pasado y presente. Él es un buen actor. Eficaz. Sabe “estar” con una gran actriz. Y en la Serie acompaña y contiene competentemente la extraordinaria y absoluta interpretación de Winslet.
En esta Serie, hay un muy buen elenco y una excelente Dirección de actores por parte de BRAD INGELSBY, que es el Director, Creador y Guionista de la Serie.
Y ahora quiero destacar con loas y Magna Cum Laude a BRAD INGELSBY: su “pulso” en la Dirección es milimétrico y de una excelencia que sorprende. El ritmo y “tempo” narrativo de su GUIÓN y DIRECCIÓN son una Cátedra de escritura y de sintaxis en la construcción de personajes, relato, secuencias, diégesis y universo narrativos y representados, y del modo cómo dirigirlos. La historia narrada ya la hemos visto semejante en otras producciones, pero él logra hacer algo nuevo, mejor y superador de lo visto en estas temáticas. En su GUIÓN siembra dudas, sospechas, pistas, inseguridades, hipótesis, preocupaciones, cuestionamientos, sensaciones… y unos ¡¡soberbios!! giros narrativos impactantes y magistrales, que nos desinstalan y nos vuelcan 360º. Es realmente ¡¡sorprendente!! lo que ha construido. Él nos va llevando y nos va acompañando en nuestro proceso y experiencia como espectadores. No tiene golpes bajos ni sensiblerías. No nos “manosea” afectiva, emocional ni emotivamente, sino que es sensiblemente serio, sólido y convincente: respeta al espectador. Y no tiene el meloso happy end hollywoodense. Todo está narrado y representado con sobriedad, contención, respeto, seriedad, coherencia, solvencia y un realismo sutil.
Está acompañado de un excelente equipo técnico, en el que valoro y destaco la Fotografía y el manejo de la cámara; y un Montaje impecable y construido sintáctica y rítmicamente como una maquinaria de relojería, en un engranaje perfecto, logrando un todo narrativo y audiovisual compacto y sin fisuras. La Música que acompaña a la Serie en sus escenas, secuencias y fondo, también merece para mí un lugar destacable en la valoración. No sólo acompaña a la Serie ni es sólo “telón de fondo”, sino que forma parte del universo total de la misma.
Y esto es todo por hoy. Esta Serie es, quizás, lo mejor en Drama que hayamos tenido durante este año. Si tenéis HBO no os la perdáis. Os la recomiendo muy especialmente. Si no tenéis esta plataforma de streaming, tratad de ver la Serie alguna vez. Quizás con amistades, o cuando salga en DVD o Bluray, o abonaos a HBO: no es caro. Y hay gastos que, para los cinéfilos y amantes del Arte, son como el agua para vivir.
Hasta la próxima, amigos.